En 2006 estuvo en Nueva York representando a un diseñador turco. Un papel que, sin embargo, fue estrecho para Harika Ustaoglu. Entonces decidió que era hora de lanzarse al mundo de la joyería. La diseñadora de Estambul, que vive y trabaja en la ciudad estadounidense, creó su propia línea de joyería y, en 2014, una marca que lleva su nombre: Harika. Dio los primeros pasos gracias a los orfebres de la ciudad turca, encargados de traducir los diseños de sus colecciones en oro y piedras preciosas, hasta que encontró apoyo directamente en USA.
El diseño de las joyas es muy moderno e indudablemente original: formas muy geométricas, muy modernas y abstractas, con diseños que se inspiran, dice, incluso en detalles capturados mientras camina por las calles de la ciudad. Las piedras también se cortan de una manera inusual. Las joyas están hechas de oro de 14 y 18 quilates y usan diamantes de todos los colores, así como piedras como aguamarina, zafiro, berilo, cuarzo. Un brazalete suyo llegó a los finalistas de Couture en la categoría de diamantes de menos de $ 20K.
