El precio de las joyas de oro va a aumentar. Es inevitable: los precios del metal amarillo han alcanzado niveles récord y, según analistas autorizados, la carrera aún no ha terminado. El precio del oro alcanza ahora los 2.940 dólares por onza (unidad de medida correspondiente a 28,3 gramos). Este precio pone en dificultades a los joyeros que utilizan mucho oro y que se ven obligados a aumentar sus precios en consecuencia, con el riesgo de reducir el número de compradores. Por ello, muchos joyeros han decidido hacer aún más finas las láminas de oro que utilizan para sus colecciones. Otros han introducido colecciones en titanio, un material difícil de trabajar, pero que tiene la ventaja de costar menos que el oro.
Las razones del repunte del metal amarillo se encuentran en gran medida en Washington. Las preocupaciones sobre los aranceles estadounidenses y las incertidumbres globales están alimentando la demanda de activos de refugio seguro: en la incertidumbre, los bancos centrales y los inversores están comprando lingotes: nunca se sabe. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció aranceles adicionales del 25% a los automóviles, junto con derechos de importación a semiconductores y productos farmacéuticos, lo que intensificó las tensiones comerciales. Para aumentar la incertidumbre, la Casa Blanca planteó la posibilidad de levantar las sanciones a Rusia durante las conversaciones diplomáticas, alarmando a Europa y a Kiev. Este es otro motivo de incertidumbre. A esto se suma la inflación en EEUU, que en lugar de disminuir como se prometió durante la campaña electoral, se mantiene por encima del nivel deseado y, en consecuencia, mantiene los tipos elevados.
Ante este escenario, no sorprende que el banco de inversión Goldman Sachs haya elevado su previsión del precio del oro para finales de 2025 a 3.100 dólares por onza (desde la estimación anterior de 2.890 dólares) debido a una demanda estructuralmente mayor por parte de los bancos centrales. Este efecto, es decir las compras directas por parte de los gobiernos, combinado con la demanda de instrumentos financieros vinculados al rendimiento del oro, debería ser el combustible para un nuevo aumento del precio del metal amarillo. Y hay un escenario aún peor: según el banco, si la incertidumbre sobre las políticas económicas, incluidas las preocupaciones sobre los aranceles, sigue siendo alta, el posicionamiento especulativo prolongado podría impulsar los precios del oro hasta 3.300 la onza a finales de año. Con el consiguiente aumento adicional del coste de las joyas.
Latest from news
Un destino de vacaciones romántico, sinónimo de lujo, combinado con la dolce vita mediterránea: Portofino es
La joyería inteligente es una de las tendencias que nos acompañarán en el futuro. Así lo
Rubinia cumple 40 años y Filodamore, una de las líneas de joyería de más éxito, festeja
Preziosa Young es un concurso que nace a raíz del evento Preziosa Florence Jewellery Week organizado
Eine Parade von Filmstars und Juwelen bei der 30. Verleihung der Critics’ Choice Awards im Barker