¿Cómo elegir el diamante para una joya? Aquí hay 9 consejos útiles para evitar malas sorpresas.
Como regalo, para su propio placer o como inversión: comprar una joya con uno o más diamantes a menudo se considera una opción segura. Pero hay que tener cuidado: además de identificar el tipo de joya que se quiere conseguir, en la mayoría de los casos se trata de un anillo, hay que evitar los errores más habituales. Así que aquí van 9 consejos para evitar errores a la hora de elegir una joya de diamantes.
1 Elija un minorista con buena reputación
Es mucho más difícil que un joyero conocido se sienta tentado a ofrecer un diamante de mala calidad o que no coincida con la descripción del que se ofrece a la venta. La reputación de un joyero es muy similar a la de un banco: nadie abriría una cuenta si sospechara que está realizando una operación de riesgo. La buena reputación de un joyero ciertamente no es una garantía absoluta, pero es un buen comienzo.
2 Compruebe que 4C
La claridad, el corte, el color y el peso (quilate) son los primeros atributos que determinan el valor de un diamante (ver también aquí). Antes de comprar un diamante, aprende estas nociones fundamentales que determinan el valor de la piedra. Y tenga en cuenta que los diamantes clasificados en el color D son los mejores, pero también cuestan mucho más que los de la categoría G. Sin embargo, pocos, cuando use un anillo, podrán reconocer la diferencia.
3 Solicite una certificación
Naturalmente, todas las características del diamante deben ser certificadas por un organismo imparcial. Para los diamantes, una certificación conocida y considerada confiable internacionalmente es la del Gia, el instituto gemológico estadounidense. Pero también existen otros, como los del High Council of Diamonds (Hrd, Hoge Raad voor Diamant), o el certificado del International Gemological Institute (Igi), etc. En resumen: no compre un diamante sin certificado. Sin embargo, tenga en cuenta que los diamantes muy pequeños y livianos a menudo no se venden con un certificado. Otro problema que no debe subestimarse es el riesgo de que el certificado sea falso. Esto también sucede, pero afortunadamente no es frecuente. Sin embargo, muchos diamantes, incluso los pequeños, están marcados con un código láser invisible (a simple vista): un aspecto que puedes verificar.
4 El corte
Es un error pensar que el color y la pureza son lo principal. Otra característica importante, capaz de influir en el costo de una piedra, es el tipo de corte. Es quizás el aspecto más difícil de evaluar si no eres un experto. Pero, por ejemplo, un diamante con un corte demasiado profundo hará que la superficie principal de la piedra sea más pequeña en relación con el peso. El resultado es que brillará menos. Un diamante bien cortado también será más fácil de revender en el futuro y producirá una luz reflejada más intensa. Además, el tipo de talla también influye en la percepción del color del diamante.
5 ¿Solo o con otros?
¿Es mejor comprar un diamante montado en una joya, o una sola piedra para guardar en el banco? Quizá lo correcto no sea ni lo uno ni lo otro. Hay una tercera solución: comprar un solo diamante, ya cortado, para observar bien sus proporciones, y luego montarlo en una joya. De esta forma se tiene la garantía de que hasta la parte no visible de la joya se corta bien, y además se puede llevar puesta la joya.
6 Incoloro o elegante?
Durante años, los precios de los diamantes de colores han ido en aumento. Pero elegir un diamante de color es más difícil, aunque ayuda una certificación que especifique el tipo y el grado de color. En general, cuanto más vibrante sea el color, mayor será el precio. Pero prepárese para escribir un cheque con muchos ceros. Por otro lado, la compra de una joya con un diamante de colores brillantes (el amarillo es el más común) podría ser un buen negocio en perspectiva, dado que el valor de estas piedras es muy demandado.
7 Mejor una luz neutral
Un consejo: cuando vayas a la joyería te mostrarán las joyas iluminadas por pequeños focos que enfocan la luz sobre las joyas. Están hechos para potenciar los reflejos de los diamantes, que brillan más. Sin embargo, pida observar el diamante con una luz neutra, como sucede en situaciones normales de la vida. Te harás una idea de lo brillante que puede ser la piedra que quieres comprar. Moviendo ligeramente la joya a la luz, se puede comprobar la capacidad reflectante de la piedra: un buen indicio para evaluar su pureza y talla correcta.
8 Tener una idea diferente
Incluso si el diamante que se le ofrece se ve fantástico, pase unos minutos en otros dos o tres joyeros: comparar joyas y precios siempre es lo correcto. Por supuesto, debe tener en cuenta la calidad del diamante y su peso. Por cierto, aquí hay otro consejo: elija diamantes que tengan un peso “extraño”. Por ejemplo, un diamante de 0.49 quilates costará mucho menos que un diamante de 0.51 quilates, incluso si es prácticamente indistinguible. El precio varía mucho si excede 1 quilate.
9 Solicite una garantía
Muchos joyeros ofrecen una garantía sobre la piedra que está comprando. No te avergüences de pedirlo: concédelo también es un gran anuncio para los mismos joyeros.