Ayala Bar’s Bijoux Verano: colores brillantes y ecos de un profundo Oriente ♦ ︎
La diseñadora israelí Ayala Bar cuenta sobre su abuela que emigró de Afganistán a Israel en los años veinte. Con un aventurero viaje de 2000 millas (más de 3.000 kilómetros) le ha traído un niño, que más tarde se convertiría en el padre de Ayala. Todo esto para explicar cómo, mientras visitaba un museo de joyas de Afganistán, descubrió puntos de contacto entre la tradición del país asiático y el estilo adoptado por ella.
Tal vez sea un signo de destino, o tal vez los grandes collares de tela, cuentas, plata, piedras, hueso, están en el Dna del Ayala Bar, que revela una parte de su sangre oriental. Quién sabe. En cualquier caso, la colección de verano de su empresa de bisutería confirma la fantasía y, sobre todo, la riqueza de elementos que se entrelazan para hacer pendientes y collares, los dos accesorios que componen casi exclusivamente la producción de Ayala Bar. Los precios incluyen siempre entre 100 y 200 euros. Margherita Donato
