En Florencia, hace cuatro siglos, Galileo Galilei usó el primer telescopio para descubrir que el planeta Júpiter tiene satélites. Ahora, siempre desde Florencia, los ojos están puestos en Saturno. No se trata, sin embargo, de una investigación de astronomía, sino de una colección de joyas. Los anillos, collares y pendientes de Saturno son uno de los últimos trabajos de Ponte Vecchio Firenze, una empresa fundada por Ugo Calà, quien de niño ayudaba a su padre en la barbería cerca del famoso puente florentino. Un lugar que, durante siglos, ha albergado talleres de orfebrería, donde el joven aprendiz dio sus primeros pasos.

Ponte Vecchio Firenze, sin embargo, no quiere simplemente volver a proponer la tradición orfebre florentina, incluso si utiliza técnicas antiguas como el engaste, es decir, un túnel inventado por Benvenuto Cellini para dar más luz a las piedras. La Maison, bajo la dirección creativa de Valentina Callo, pretende sumar un estilo más a la moda, como lo demuestra la colección Saturno, realizada en oro, diamantes de varios colores y piedras como rubíes y zafiros. La forma elíptica, que recuerda a los famosos anillos del planeta, tienen una estética moderna, sin dejar de lado la calidad de fabricación.




