Hay dos realidades: una es la existencia que llevamos todos los días, la otra está oculta. Es el concepto básico de una película que hizo historia en el cine: The Matrix. Quién sabe si fue esta realidad paralela la que inspiró a Swarovski en la colección Matrix. La matriz, en este caso, es el lujo, pero a un precio accesible que caracteriza los productos de la Maison austriaca. Swarovski ofrece pequeños cristales de cristal o de circonita cúbica (a veces utilizados juntos) en esta colección en una amplia selección de joyas, 107 piezas diferentes que incluyen anillos, collares, pendientes y pulseras.
Los cristales utilizados tienen diferentes formas, un poco como los diamantes: pueden tener talla redonda, de lágrima, de baguette o de corazón. El metal (de tipo no especificado) que sostiene los cristales está rodiado: un proceso que sirve para garantizar el brillo. En algunas piezas también se utilizan pequeñas perlas, siempre de cristal. El color blanco caracteriza a la mayoría de las joyas, pero algunas piezas utilizan circonitas cúbicas de colores o un metal en tono oro rosa.