Medio siglo de actividad de Breda Gioielli, empresa con sede en Conegliano (Treviso). Fundada en 1974 por los esposos Renato y Gabriella Breda, hoy está dirigida por la segunda generación, las hermanas Daniela y Marzia Breda. Para celebrar el compleanno número 50, Breda Gioielli ha decidido dedicarse a una cultura, El olivo blanco, del artista Agatino Cappella. El tronco de la obra es de mármol de Carrara y descansa sobre una base de madera de olivo envejecida, con frutos elaborados con 3003 diamantes colocados sobre ramas y hojas en platino de más de 366 quilates. La obra, después de haber sido expuesta en Vicenzaoro, Milán, Shanghai, Beijing, Hong Kong y Doha, así como en el Festival de Cine de Venecia, ahora puede admirarse por primera vez en la zona de Treviso gracias al amable permiso de Giuliano Castrenze, director general de World Diamond Group Spa, propietario de la escultura.

Será un quincuagésimo aniversario muy especial. Lo celebramos exponiendo esta obra e invitando a toda la ciudad a una gran fiesta. Queremos poder agradecer este medio siglo junto a todos nuestros clientes que nos han elegido para celebrar los momentos importantes de sus vidas. Compromisos, bodas, nacimientos y otros aniversarios, hemos sido partícipes, durante más de medio siglo, de las historias de muchísimas personas. Como nos gusta estar centrados en el aquí y el ahora, también aprovechamos para crear un evento que ofrezca una nueva posibilidad de entretenimiento y cultura a la ciudad que tanto amamos.
Daniela y Marzia Breda

En 1986, con tan solo 19 años, Daniela ingresó a la empresa aportando su visión pero también ocupándose del aspecto administrativo y financiero. Marzia, gemóloga y maestra orfebre, se unió entonces al equipo familiar, completando así la puesta en marcha de la segunda generación en el negocio. Marzia, hasta el año pasado, fue presidenta de Federpreziosi Treviso, mientras que Daniela ya en los años noventa militaba en la junta directiva local de Ascom. La trayectoria formativa y la sensibilidad de Daniela dieron vida a la marca Heteriah, una joya que profundiza en el significado de las piedras y ofrece una mirada a las energías sutiles. Y la línea Madame Black ofrece joyería a medida dirigida a clientes apasionados por el mundo negro, gótico y rockero. Hoy, además de los dos propietarios, aparece la tercera generación: la hija de Daniela, Ginevra, y la hija de Marzia, Noemí.
