Nueva joyería extraordinaria firmada por Paolo Piovan: además de los animales, aquí están las flores ♦ ︎
Formas barrocas de animales que hacen de cada joya un trabajo de talento excepcional, así como una pieza de orfebre de alta destreza. Desde Padua, la marca Paolo Piovan, gracias a la artesanía y la creatividad inagotable de su fundador, logró hacerse conocer en todo el mundo. Y ahora, junto con las colecciones de Animalier por las que se hizo famoso, Piovan también está desarrollando líneas más clásicas. Pero debemos interpretar el concepto: clásico no significa igual a muchos otros, ni la renuncia a su estilo (hablaremos de eso otra vez).
Junto a piezas dedicadas a animales como el guepardo, el loro o la cobra, aquí hay joyas en forma de flor, como Iris, anillo hecho a mano en oro de 18 quilates con diamantes blancos, grises y azules y aguamarina. O la colección Equestrienne, un trío de anillos inspirados en caballos, hechos a mano en oro de 18 quilates y diamantes. O, incluso las flores hechas con ópalo y diamantes. Incluso estas piezas de gran virtuosismo, gracias a la capacidad no solo de concebir el equilibrio entre los volúmenes de los pétalos, los diferentes tonos de azul y verde iridiscente, sino también para trabajar las piedras tan ligeras que parece ver las flores flotando en un espejo de agua. Sin desvanecerse. Giulia Netrese