Las joyas pintadas a mano de Gabriella Rivalta con esmalte coloreado en oro o plata cumplen 50 años ♦ ︎
La risa y el cepillado han pasado los 50. Por otro lado, cuando trabajas y te diviertes, cuando eres creativo, cuando vives en un entorno propio, el tiempo pasa rápidamente. Fue en 1969 cuando la joven Gabriella Rivalta decidió dedicarse en cuerpo y alma a la pintura. Pero en lugar de lona eligió el metal, el oro. Y en lugar de témpera o óleos, optó por los esmaltes.
Por supuesto, no es fácil pintar muchas joyas a mano, una por una. Pero esto es lo que hace este pequeño taller en una antigua casa de labranza en Casale Monferrato, en las profundidades de Piamonte.

Un lugar completamente tranquilo, fuera del tiempo, como las joyas de oro iluminadas de Gabriella Rivalta: colgantes, pulseras, collares que tienen a la naturaleza como su tema principal, pero no solo. Para joyas de una naturaleza explícitamente romántica, que parece provenir directamente de hace un siglo, la pequeña Maison ha ido agregando con el tiempo piezas aún más modernas, pero siempre se caracteriza por el acabado a mano, lo que hace que las joyas sean diferentes entre sí. Precios: los brazaletes con encaje de cuero y colgantes de plata pintados comienzan en unos 250 euros, hasta el collar y los pendientes combinados en oro de 18 quilates, pintados a mano con esmaltes de fuego alto, perlas y rubí central, que llegan a 1790 euros. Giulia Netrese






