Su anillo fue el lote superior en Brilliant & Black, la subasta de Sotheby’s dedicada exclusivamente a diseñadores negros, aunque en verdad Maggi Simpkins tiene rasgos físicos que podrían confundirla con una mujer mediterránea. Pero ese no es su rasgo distintivo. La diseñadora nacida en Portland, Oregón, ha seguido un camino diferente al de la mayoría de sus colegas en el mundo de la joyería. De hecho, no tiene una formación tradicional en bellas artes o joyería. En resumen, ningún diploma clásico de la Gia, pero mucha inspiración. También gracias al ambiente que se respira en la familia, con padres creativos de profesión.
En definitiva, Maggi Simpkins ha ido perfeccionando su proceso creativo a lo largo del tiempo para sus joyas, pero que la diseñadora también traslada a la indumentaria o al diseño de interiores. Vive y crea sus joyas, hechas por encargo, piezas únicas en su tipo, desde su estudio en Los Ángeles. Aunque no fue a la escuela de diseño, cuando tenía 20 años y acababa de dejar la universidad, diseñó una línea de joyería de moda para una marca privada. Los diseños se compraron a BCBG y Nordstrom. Experiencias en el mundo de la joyería que han continuado con otras colaboraciones para empresas del sector. Hasta que comenzó a recibir suficientes consultas de particulares y en 2015 comenzó su propio negocio.
Ella crea principalmente anillos poco convencionales con grandes piedras rodeadas de otras gemas de colores, con un estilo original. Naturalmente, eliges los materiales de acuerdo con el principio ético y sostenible. Una de las últimas creaciones es un par de auriculares Bose Ultra Open personalizados con oro de 14k y diamantes para el artista emergente Kenzie Ziegler.