Las conchas africanas se transforman en joyas de oro y diamantes. Con inspiración de los antiguos ritos del continente negro ♦
África y los diamantes son una combinación natural. Pero los diseñadores africanos con experiencia y gusto para trabajar en Occidente son pocos: entre ellos se encuentra Catherine Sarr, nacida y criada en Francia, pero originaria de Benin, la diseñadora eligió luego vivir y trabajar en Londres. Antes de fundar Almasika, que en 2021 fue seleccionada entre los finalistas de Couture Design, trabajó para varias marcas de lujo, entre ellas De Beers. La pasión de Catherine por la joyería va de la mano de su fascinación por los diseños tradicionales de su país de origen. Almasika representa el resultado de esta ambivalencia. El nombre proviene de Almasi, la palabra swahili que significa diamante, y Sika, que significa oro en varios idiomas de África occidental.
Un ejemplo fue su primera colección, Le Cauri Endiamanté, que toma la forma de una concha, la clásica concha de cauri. Esta concha fue en el pasado símbolo de prosperidad, espiritualidad y fertilidad: se utilizó como adorno y también como moneda en varios reinos africanos, convirtiéndose en sinónimo de riqueza y suerte. Y todavía los utilizan los adivinos o los usan como talismán. Pero en este caso también son una apreciable joya de oro y diamantes. Otra colección simbólica del estilo de Almasika es Universum, una línea de joyas inspiradas en la geometría cósmica.