Una colección limitada para Lydia Courteille, que celebra los símbolos y las profecías de los nativos americanos. La ecléctica diseñadora parisina, conocida por sus joyas caprichosa y fantástica, algo así como un cuento de hadas, interpreta a su manera, los objetos y materiales de la tradición. Por ejemplo, la piedra por excelencia de los indios, la turquesa, que es también una tendencia de este año, es grande, tiene una forma cilíndrica como tótems y se utiliza en la tonalidad verde. Para los Guerreros del Arco Iris, los protagonistas de una leyenda de la tribu Hopi, anunciando su llegada a enseñar a la gente de todo el mundo cómo amar y adorar a la Madre Tierra, se inspira anillo con una piedra lunar extravagante y zafiros multicolores. Y más, plumas modeladas en plata y diamantes, que simboliza la fuerza creativa, flechas asimétricas iconografía del cazador, animales divertidos y águilas en zafiros pavé que transforman el folclore indio en diseño refinado.








