Weingarten es un pequeño municipio agrícola en el distrito de Karlsruhe, Alemania. En alemán su nombre significa jardín de vino. Pero también es el jardín en el que creció Brigitte Adolph, que proviene de una familia de maestros artesanos (su padre era Goldschmiedemeister, su madre orfebre y su abuelo relojero). Las raíces familiares han inspirado el trabajo de la diseñadora, licenciada en diseño de joyas por la prestigiosa Universidad de Pforzheim, donde perfeccionó su estilo característico: piezas de filigrana que combinan detalles intrincados con una estética contemporánea, lucidas por primera vez en Vicenzaoro en enero.

Son joyas que expresan romanticismo, elegancia e individualidad. Sus diseños se caracterizan por una delicadeza similar al encaje, un sello distintivo que transforma el oro, la plata y las piedras preciosas en piezas que parecen tan suaves y aireadas como las telas. Inspiradas en el encaje y en tejidos históricos, sus creaciones evocan una sensación de nostalgia sin dejar de ser innegablemente modernas. Las colecciones de la pequeña Maison están hechas a mano, garantizando que cada pieza sea tan única como la persona que la usa. Pero no sólo eso. Las joyas de Brigitte también reflejan su creencia en la espiritualidad, la conexión y el amor. Las joyas de Brigitte Adolph ya han recibido numerosos premios y reconocimientos internacionales.

Mi objetivo es crear joyas que sean como una dulce caricia: preciosas, delicadas y de belleza atemporal.
Brigitte Adolfo


