Desde Rusia con amor: las joyas de cuento de hadas de Ichien, una pequeña Maison en Moscú ♦ ︎
Como otras casas rusas, Ichien no es ampliamente conocido en Occidente. Sin embargo, vale la pena mirar de cerca el trabajo de la compañía fundada en Moscú en 2008. Su nombre, en primer lugar: es en honor del fundador y diseñador jefe de la marca Mher Karapetyan Tigranovich, conocido como Ichien, nacido y vivido en la pequeña ciudad armenia de Echmiadzin. Luego estudió en el Colegio de Arte de Ereván en la Facultad de Pintura. En 1999 se mudó a Moscú y durante dos años estudió en el instituto de arte llamado VI Surikov. Según cuenta, su camino en la joyería comenzó en la biblioteca del Instituto Surikov.
Al estudiar el arte de principios del siglo XX en la biblioteca, en uno de los libros el joven vio los bocetos de las joyas de Alfons Mucha. Y desde ese momento asistió a la biblioteca del instituto solo para estudiar las joyas. “Tuve mucha suerte”, dice hoy. “Desde el principio me encontré y me hice amigo de joyeros que eran muy exigentes con la equidad y la calidad del trabajo y estaban ansiosos por hacer algo nuevo. Con ellos comenzó a trabajar y al mismo tiempo estudiaba joyas”.
El joven diseñador armenio fue luego a India y Taiwán, donde estudió acupuntura y pintura. En India, conoció al Maestro Zen, quien le dio un nuevo nombre: Ichien. La palabra en chino significa “una mirada”. En 2008, Mher-Ichien regresó a Moscú y abrió la empresa que lleva su nuevo nombre. Su trabajo ya ha recibido premios de los principales concursos internacionales de diseño de joyas, en particular, los Hong Kong Design Excellence Awards. Alessia Mongrando