Adrian Cheng y su Chow Tai Fook en el Olimpo de el diseño asiático ♦
En la subasta de Christie’s a finales de mayo en Hong Kong, un conjunto diseñado por Adrian Cheng compuesto de un collar geométrico complicado con turmalina verde rectangular dentro de un ónix perforado, rubíes, zafiros y diamantes, pulsera y un anillo, montado en oro y fabricado por Chow Tai Fook, se vendió por 32.239 dólares. Pero, en realidad, no es el precio lo que cuenta, sino el reconocimiento de un diseñador joven y fuera de lo común. Adrian Cheng Chi-kong nació en 1979 y es el fundador de K11 y K11 Art Foundation, pero también director ejecutivo de Chow Tai Fook Jewellery Group de Hong Kong. También es patrón. Nació en una familia rica: es nieto de Cheng Yu-tung y heredero de una de las familias más influyentes de China, con empresas valoradas en 16.600 millones. Cheng, sin embargo, eligió más creatividad que negocios: se graduó en Arte antes de ir a Japón para estudiar la cultura del país. Él es también uno de los coleccionistas chinos más grandes del arte.
El año pasado Chow Tai Fook presentó una colección inspirada en los grandes pintores del abstractismo, Le Labyrinthe Artistique. La colección de joyas de gama alta, por supuesto, es la cara de diamante (por supuesto) de la Maison especializada en joyas para bodas o ceremonias, con cientos de tiendas en China. Ahora Christie’s lo ha consagrado entre los grandes diseñadores también. Giulia Netrese
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