Un arco iris se puede definir simplemente como un fenómeno meteorológico causado por la reflexión, refracción y dispersión de la luz en las gotas de agua en la atmósfera, lo que provoca la aparición de un espectro de luz en el cielo en forma de arco circular multicolor. Pero sería quedarse corto. Porque el arco iris siempre ha sido también un símbolo, un acontecimiento que ha alimentado la mitología y los cuentos de hadas. En la mitología de la antigua Europa del Norte, el arcoíris de Bifröst se convierte en un puente que conecta el mundo de los hombres con el de los dioses. O está Cuchavira, dios del arcoíris para la cultura Muisca (ahora Colombia). Al final de un arcoíris, todavía cuentan los mitos nórdicos, se encuentra el escondite secreto de un elfo irlandés con una olla de oro.
Toda esta premisa sirve para presentar una sencilla colección Rainbow de la marca toscana Amen. La colección se compone de anillos y pendientes realizados en plata rodiada, con el añadido de circonitas cúbicas blancas o de colores. El precio no llega a los 50 euros, un milagro del arcoiris.