Cómo y por qué elegir un anillo de esmeralda: consejos útiles para comprar la piedra verde ♦ ︎
¿Es el verde tu color favorito? Sin duda es el color de los prados, pero también de Irlanda, de la juventud y mucho más. Por ejemplo, esmeraldas. El verde está muy de moda, también gracias a la conciencia de que se necesita una mayor protección del medio ambiente. Entonces, si desea comprar un anillo de esmeralda, ha tomado la decisión correcta. Espera un minuto: ¿puedes elegir un anillo de esmeraldas? Esto es lo que necesita saber (y no se salte el n. ° 5).
1 Atención al tratamiento. A menudo, las piedras que utilizan los joyeros no se encuentran en las mismas condiciones que cuando se extraen del suelo. Las esmeraldas, por ejemplo, en la mayoría de los casos se tratan de alguna manera para mejorar su apariencia. Y esto sucede porque las esmeraldas muy a menudo tienen inclusiones, también llamado jardín de manera romántica. Estos jardines pueden alterar demasiado el aspecto de la piedra y, por este motivo, pueden eliminarse o reducirse con diferentes métodos. Esto no está mal si mejora la apariencia. Otro problema que casi siempre se encuentra en las esmeraldas son las microgrietas presentes en la piedra. Por tanto, es mejor saber a qué tratamiento se somete la esmeralda que quieres comprar. A menudo, por ejemplo, las esmeraldas se tratan con un aceite especial o resina sintética. Para mejorarlas, las piedras se sumergen en el líquido, que posteriormente se comprime en la gema para que pueda penetrar lo más profundamente posible entre las microgrietas de la esmeralda. El tratamiento con aceite es el más natural y no permanece para siempre en la piedra. Aun así, sin embargo, las inclusiones pueden ser visibles. No hay nada de malo en eso: pero debes saber que las esmeraldas más preciosas (muy raras y mucho más caras), sin embargo, son aquellas que no se someten a tratamientos.
2 Pregunte de dónde viene. Cuando compre un anillo de esmeralda, pregunte dónde se extrajo la piedra. Las esmeraldas más preciosas, por ejemplo, provienen de Colombia, muchas veces también son más claras y transparentes. Por esta razón, el verde a veces puede parecer un poco menos intenso. Las esmeraldas más populares son aquellas con un tono más oscuro y profundo, que casi tienden al azul. Por otro lado, una esmeralda sin tratar, aunque sea un poco pálida, pero sin inclusiones, puede ser más preciosa que una oscura tratada. Otras esmeraldas excelentes provienen de países africanos, como Zambia. Pero también de Zimbabwe y Etiopía.
3 Cómo evaluar una esmeralda. ¿Cuánto vale realmente una esmeralda? Difícil de decir: puede ir desde unos cientos de euros o dólares hasta miles por cada quilate, todo depende de la calidad. El color es el aspecto más considerado al establecer el precio de una esmeralda. El tono más popular tiende a ser un color vivo y saturado, pero no demasiado oscuro. Otro aspecto importante es la transparencia: cuanto más se parecen a un cristal, más se requieren. El tercer parámetro importante es que el color se distribuye uniformemente. Por lo tanto, observe bien su esmeralda antes de comprarla.
4 La forma es importante. El corte clásico de la piedra verde se llama corte esmeralda. Es un corte de tipo rectangular, con canto escalonado, facetas lineales rectas, dispuestas paralelas a lo largo de la piedra. Para evitar la fractura de la piedra preciosa, se suelen cortar las esquinas de una piedra tallada con esmeralda, para evitar fricciones o impactos aleatorios. Este tipo de corte también tiene otro motivo: es el que mejor se adapta al tipo de cristal con el que están compuestas las esmeraldas. Además, es el corte el que consigue que las microgrietas sean menos evidentes.
5 Cuidado con los clones. Crece la idea de que es más respetuoso con el medio ambiente utilizar piedras sintéticas en lugar de gemas naturales, extraídas de la tierra. Es un aspecto controvertido. En cualquier caso, las esmeraldas generalmente sintéticas (pero también los diamantes y otras piedras) se comercializan generalmente con el nombre de la empresa y la palabra «creado» o «crecido», cultivado en laboratorio, es decir, procedente de un laboratorio. Tampoco encontrarás la palabra «sintético», pero es lo mismo: cuestan menos, pero no es una piedra natural. A ti la elección.
6 Cómo limpiar la esmeralda. Recuerda que una esmeralda casi siempre tiene micro fracturas, generalmente invisibles a simple vista. Por tanto, evita los detergentes agresivos, pero también limpiar con ultrasonidos o vapor. El agua tibia y unas gotas de jabón neutro, por otro lado, están bien.