Carlton Jewelry, empresa nacida en Portugal, propone joyas originales, pero a precios asequibles. Aquí están las dos primeras colecciones, Leaf y Lisbon ♦
En Coimbra, ciudad medieval de Portugal, dicen haber estudiado el informe de una de las firmas de consultoría más famosas del mundo, McKinsey. Los analistas de la compañía han pronosticado que en el mercado de la joyería en 2020 estarán creciendo exponencialmente las marcas que pueden ofrecer joyas entre 500 y 1500 euros. Y eso es lo que pretende hacer Carlton Jewellery, liderado por Carlos Góis, crecido en una familia de joyeros portugueses en la antigua ciudad que en la Edad Media era la capital del país.
El desafío de Góis, que ha estudiado economía, es encajar en ese segmento de mercado donde la joyería a menudo no tiene una Maison con una marca fuerte. En definitiva, Carlton tiene grandes ambiciones: proponer joyas de calidad en Europa, pero a un precio asequible. Las colecciones presentadas en Baselworld siguen esta filosofía. Leaf, colección obviamente inspirada en el mundo vegetal, o Lisbon Lights, que también utiliza pequeños diamantes como serían las luces del gran puente metálico para iluminar anillos, collares y pulseras. Lavinia Andorno
